23 septiembre 2007

un cuento

Hola amigas, queria dejaros aqui, un pequeño cuento que le regalé a una amiga, me gusta escribir, pero no soy muy buena en el tema... asique pido perdón a aquellas expertas que puedan leer esto.

el titulo se ha puesto Pumuky, ya que era parte del regalo que ella lo eligiera

El reflejo de los deseos
o el porque de la amistad de un duende

Érase que se era, en unas tierras lejanas, una casita pequeña y colorida, llena de sol y alegría, dónde vivía una hermosa niña. Estrella la llamaron, porque su mirada lucía como las estrellas en el cielo.
Todos los días se levantaba temprano, al salir el sol, para poder ver el despertar de las flores y poder darles los buenos días.
Hoy, queria coger un ramo para su mamá , asique se levantó como cada mañana,cogió su cesta y se dirigió hacia el prado cuando de repente:
-Holaaaa, buenos días
Miró a su alrededor, pero no vió a nadie.
-Holaaaaa-volvió a escuchar- estoy aquí abajo....
Miró hacia el suelo y vió una muchachita muy pequeña, con ropas de muchos colores, un gorrito rojos y unas botas verdes. Estrella se quedó muda de la impresión, pero hizo un esfuerzo y preguntó:
-¿Quien eres? ¿Qué eres? ¿De dónde sales?
-Me llamo Pumuky, soy un duende y salgo del país del amor. Si me enseñas el reflejo de una flor, te concederé tres deseos.
Estrella se puso muy contenta, ya que era la primera vez que veía un duende y siempre le habían contado que sólo ven los duendes la gente buena, y además podía pedir tres deseos..... saltaba de alegría.
-Ah!!!! -dijo Estrella- eso es fácil,siempre que los juncos nos dejen, ven conmigo..........
Se acercaron a un remanso del río.....en sus orillas le vantaban los juncos, los señores de las orillas.
-Señores juncos,vengo con una amiga, ella quiere ver el reflejo de una flor,¿ustedes podrían ayudarnos?
Los juncos se cimbrearon, abrieron paso hacia la orilla del río y dejaron a la vista un jardín de nenúfares.....las libélulas se paseaban con vuelos rasos, dejando pasar los rayos del sol a través de sus alas..... En el agua se reflejaban los colores blancos y rosados de las flores más bellas que Pumuky había visto nunca.......
De repente el duende se puso a llorar
-Oh!! Que recuerdos...........
Estrella la abrazó y le secó las lágrimas....
-¿Qué te ocurre? No llores.... me entristece...
-Me recuenda a mi mamá.......-y siguió llorando-Hace mucho que no la veo.Una mañana salí a pasear y me perdí, nunca encontré en camino de regreso a casa......Aún me queda la esperanza de volver a verla algún día......... Y ahora lo prometido es deuda, me has hecho feliz por unos instantes , asique pídeme tus deseos.........
Estrella pensó un poco y dijo:
-Mi primer deseo es que encuentres a tu mamá, el segundo es que seas tan felíz con ella como yo con la mía y el tercero es.......
-Noooooo no lo digas- se apresuró a decir Pumuky- el último déjalo para tí, algún día lo necesitarás.
Seguidamente Pumuky desapareció entre los nenúfares y Estrella se quedó sola a la orilla del río.

Días después Estrella recibió una carta:

-Estoy feliz, no tengo palabras para agradecerte todo lo que has hecho por mí.....todos lloran de alegría.Estaremos siempre contigo, para todo lo que necesites, sólo tienes k decir mi nombre y yo apareceré junto a tí.
Tu amiga para siempre Pumuky
desde el país del amor

Estrella estaba feliz, pues ahora tenia una amiga para siempre

Blanca

1 comentario:

Anónimo dijo...

es precioso, me gusta tu estilo